Un chequeo del pie puede alertar sobre una arritmia
La fibrilación auricular (FA) es la arritmia más frecuente y quienes la presentan tienen cinco veces más chances de sufrir un ataque cerebrovascular (ACV). En las personas con diabetes ese trastorno del ritmo cardíaco es más frecuente, pero en muchas está subdiagnosticado. Especialistas afirman que un simple chequeo del pie puede contribuir a su detección temprana.
Esa fue la conclusión a la que arribó una investigación presentada en en EHRA 2021, un congreso de la la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por sus siglas en inglés).
«En nuestro estudio, uno de cada seis pacientes con diabetes tenía fibrilación auricular no diagnosticada previamente», dijo el autor del estudio, el doctor Ilias Kanellos, de la Universidad Europea de Chipre. «Esto presenta una oportunidad de proporcionar tratamiento para prevenir accidentes cerebrovasculares posteriores», afirmó.
¿Qué es la fibrilación auricular?
La fibrilación auricular provoca que los latidos del corazón sean irregulares. Se debe a que en lugar de contraerse rítmicamente y permitir así el paso normal de la sangre hacia el ventrículo, la aurícula izquierda realiza un movimiento caótico que favorece la formación de coágulos. Esos coágulos pueden desprenderse y desplazarse por las arterias hacia distintas partes del cuerpo, el cerebro es una de ellas.
La diabetes es un factor de riesgo independiente de fibrilación auricular. La prevalencia de este trastorno del ritmo cardíaco es al menos dos veces mayor en los pacientes con diabetes en comparación con quienes no presentan esta condición.
Asimismo, las personas con fibrilación auricular tienen un riesgo cinco veces mayor de sufrir un ACV. La importancia de detectarla en forma precoza radica en que la medicación anticoagulante es una terapia preventiva eficaz para reducir el riesgo de sufrir un ataque cerebral vinculado a a esa arritmia.
Las personas con diabetes deben autoexaminar sus pies y acudir a controles. Foto ilustrativa Shutterstock.
Control del pie diabético
Las personas con diabetes deben prestar especial atención al estado de sus pies. Esto se debe a que el aumento de azúcar en la sangre causa mala circulación, daño a los nervios y entumecimiento y, en última instancia, podría provocar la amputación del pie si no se detectan los problemas.
Por eso los especialistas aconsejan que quienes tienen diabetes se hagan un autoexamen cada vez que se bañan, además del chequeo periódico con el especialista.
En Argentina, la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (cuyos resultados se publicaron en 2019) reveló que sólo a 3 de cada 10 personas se les había revisado los pies en la consulta (para detectar y tratar úlceras diabéticas).
Una factor de riesgo subdiagnosticado
«El chequeo anual incluye palpar las arterias de los pies para examinar si hay un flujo sanguíneo saludable. Durante este examen notamos que algunos pacientes tenían un ritmo irregular y decidimos investigar su utilidad para diagnosticar la fibrilación auricular», explicó Kanellos sobre la investigación que presentó en el congreso de la ESC.
Se trató de un estudio observacional que se prolongó durante un año e incluyó a 300 personas con diabetes (180 hombres y 120 mujeres) que asistían a sus controles anuales del pie.
En ese marco, se capacitó a ocho podólogos para detectar anomalías del ritmo durante la palpación del pulso de las arterias del pie. También se les mostró cómo confirmar sus hallazgos utilizando un dispositivo de ultrasonido Doppler portátil.
Los pacientes con anomalías del ritmo durante la palpación del pulso de las arterias del pie se sometieron luego a una ecografía Doppler para verificar las observaciones.
La edad promedio de los participantes fue de 60 años, edad en la que la fibrilación auricular es más frecuente. Los investigadores encontraron que 51 pacientes (17%) tenían fibrilación auricular no diagnosticada previamente (no hubo diferencias significativas entre hombres y mujeres). Se les recomendó que visitaran a un cardiólogo para un electrocardiograma (ECG) para reforzar el diagnóstico y discutir el tratamiento.
«El estudio ha identificado una forma simple, rápida y de bajo costo de identificar a los pacientes con diabetes que tienen un trastorno del ritmo cardíaco que desconocían. Esta intervención tiene el potencial de evitar accidentes cerebrovasculares y preservar la calidad de vida en este grupo de pacientes», concluyó Kanellos.
El tratamiento de la FA reduce el riesgo de sufrir un ACV. Foto ilustrativa Shutterstock.
Los riesgos del subtratamiento
Pese a que la FA es la arritmia más frecuente y que quienes la presentan tienen quintuplican el riesgo de sufrir un ACV, en 8 de cada 10 casos ese trastorno del ritmo cardíaco está subdiagnosticado, según alertó un artículo publicado en 2017 en International Journal of Stroke.
Ese trabajo, dirigido por el neurólogo argentino Luciano Sposato, quien actualmente se encuentra a cargo del equipo de Accidente cerebrovascular, Demencia y Enfermedad Cardíaca del London Health Sciences Centre de la Universidad de Western Ontario, en Canadá, advertía sobre las «consecuencias catastróficas» del subtratamiento.
«Es una catástrofe médica, social y económica altamente prevenible», planteaba Sposato sobre la subutilización global de la anticoagulación oral para prevenir el infarto cerebral en pacientes fibrilación auricular.
Fuente: https://www.clarin.com/buena-vida/simple-chequeo-pie-puede-alertar-arritmia-eleva-riesgo-acv_0_cOBq3W0vQ.html