Milei busca la eliminación del sistema previsional

20-3-2022-jubilaciones

Ariel Samana

El hastio del votante, se expresó claramente en las elecciones primarias pasadas, y eso eligió una vez más un cambio, como huyendo con enojo de las propuestas de los de siempre, pero también imbuido en el enojo con la clase dirigente, que supuestamente representa, cada día mas sorda, menos autocritica, y pragmática, termina eligiendo una nueva casta que pretende la eliminación del otro.

El partido más votado busca la eliminación del sistema de previsión social público, pregonando el ahorro individual y el salvarse uno mismo en recursos económicos, de salud, y bienestar en la vejez; ponderando que el mercado en su pelea supuestamente sana, brindará como un mantra los mejores recursos y opciones a los ávidos consumidores, sin recursos estos en su mayoría. Y aquí se verán afectados los adultos mayores.

La prueba a la que se remite es a la de sociedades exitosas, que en materia previsional hicieron agua, destruyeron la calidad de vida en la vejez, tuvieron que ser repensadas, normativamente modificadas las prestaciones previsionales privadas, porque obviamente las empresas, como actividad lucrativa privada, nunca hacen el bien común, sino su negocio.

Por ello, uno puede escuchar premisas veraces, como un estado gigante, gastador, descontrolado en el gasto público, sin auditorías, lleno de kioscos de corrupción, pero las conclusiones son falaces, entre ellas la que pregona que el mercado será el que dará en una sana competencia el mejor servicio a un buen precio. 

La necesidad de una reforma

El sistema previsional requiere una reforma profunda. Una administración autárquica real de sus recursos, un incentivo al aporte previsional de todos los activos, una estimulación también con características diferenciadas para el beneficiario previsional, propugnando la reinserción laboral, auditorias y reinversión de los recursos en proyectos productivos.

También, la restricción del criterio de pension por fallecimiento cuando el mismo no cumple el rol de cubrir económicamente, quien en vida tampoco lo hacía, o no produce su ausencia un menoscabo económico real eso en consonancia con un ingreso base que cubra la canasta básica previsional; el estímulo también al ahorro individual principalmente a autónomos y monotributistas, para que estos puedan planificar su retiro con un considerable monto que cubra sus necesidades básicas en la vejez, más allá de continuar con la actividad laboral, pero siempre en un rol donde el estado mantenga la presencia en esta área tan sensible, que dejarla en manos del mercado ya experimentamos las nefastas consecuencias.

Qué están haciendo países de la región en materia de jubilaciones

En países de la región basta algunos ejemplos.

* REPUBLICA DEL SALVADOR, con quienes permanezco en contacto y seguimiento del sistema de seguridad social, se decidió mediante dos decretos (614 y 615) a fines de 2022, la creación de un sistema mixto previsional asegurando el estado un haber previsional de U$400 de minima, mas allá de la cotización individual con las administradoras privadas, la eliminación de unas cuantas cotizaciones de estas, y la creación de un ente estatal Instituto Salvadoreño de Previsión. Se trata de un país que por estar dolarizado no cuenta con soberanía monetaria, y justamente se vio condicionado en muchas de las medidas dependiendo en gran medida de las remesas, al igual que Ecuador, otro país empobrecido sin moneda propia, con un ingreso alto en PBI de remesas de los migrantes.

CHILE: Primero fueron los retiros anticipados de las AFP ante un contexto de crisis y falta de recursos de la población, luego la propuesta de un sistema estatal a la par del privado, lo mismo en Uruguay con el BPS jugando un rol importante ante las administradoras privadas; y así tenemos otros tantos ejemplos, como en Bolivia.

Por ello, la privatización total que pretenden los supuestos liberales hace de ello -como en los 90- pingües negocios para la misma casta de siempre. Eso si, los responsables no son ni el otro, ni la casta, ni juntos, ni con un cambio, sino nosotros los votantes, que además de hacernos cargo de elegir, deberíamos proponer mejoras para un bien individual dentro de un bien común.

* Abogado, especialista en temas previsionales.

Fuente: Perfil