Historia de refranes
La historia de los refranes: «Quien a hierro mata, a hierro muere». Uno de los que estaban con Jesús sacó su espada e hirió al servidor del Sumo Sacerdote, cortándole la oreja. Jesús le dijo: “Guarda tu espada, porque el que a hierro mata a hierro muere” (Evangelio de San Mateo, capítulo 26, versículos 51-52). Jesús sabía de la ley del talión.
POR HUGO PAREDERO
Quien a hierro mata, a hierro muere
Sin quitarle derecho autoral a Jesucristo, esta sentencia se había hecho notar en la Ley del Talión, del Cogido de Hammurabi, en Babilonia, siglo VIII antes de Él, con otras palabras: “ojo por ojo y diente por diente”, el concepto es el mismo…
En este dicho se habla de recibir como pago la misma moneda, es decir, experimentar en nosotros el mismo daño que causamos a otros. Y si la rascamos un poco más, la frase apela a la justicia divina que nos indica que, más tarde o más temprano, los violentos recibirán el mismo trato que dispensan a los demás… Prima hermana de aquella “Quien siembra vientos, cosecha tempestades”…
¿Y el hierro, qué simboliza? ¿Se equivocó Jesús cuando dijo hierro en vez de acero, dado que hablaba de espada? No, no se equivocó. La espada había aparecido cuatro siglos antes que Él, inicialmente eran de cobre, luego de bronce, ¡luego de hierro!, el acero templado vendría después…
Lo cierto es que este refrán, que habla de matar y de morir, envuelve cierto sentido de confianza en una justicia vengativa, “ya te va a llegar el día a vos”… Una advertencia para alguien que ha cometido un daño y aún no ha sufrido las consecuencias…
Canciones, películas, mesas redondas han girado en torno a esta expresión. Incluso filosofías orientales, que ven en ella la idea clave del karma… Esa confianza, o creencia, de que el tiempo pondrá las cosas en su lugar, de que, al final, a quien actúa de una manera se le acaba pagando con la misma moneda, termina probando su propia medicina…
La variante caribeña toma solamente la primera parte del refrán: “El que a hierro mata, no muere en su cama”, dicen ellos…
Fuente: Télam