Toda paciente tiene derecho a una reconstrucción mamaria

El 90 % de las pacientes que requieren una mastectomía, están en condiciones de realizarse la reconstrucción en forma inmediata y muchas pacientes operadas hace años o décadas, también pueden acceder en forma diferida a la misma.

Más de 19.000 mujeres por año tienen cáncer de mama, una de cada 8 mujeres podrán padecer la enfermedad durante el transcurso de su vida.  La mastectomía es la resección completa de la mama que se realiza en un 30 % de las pacientes y la reconstrucción mamaria tiene un objetivo prioritario para mejorar la calidad de vida y devolverles su imagen corporal y su autoestima a través de técnicas que devuelven la forma, volumen, consistencia, caída y proyección de la mama mutilada o de la mama parcialmente extirpada cuando se realiza una cirugía conservadora de la mama aprovechando muchas veces la oportunidad para lograr la mejoría estética de la mama contralateral buscando una simetría entre ambas.

Es importante que la paciente sepa que nunca se recupera la mama pérdida pero, conociendo las limitaciones del procedimiento, la Cirugía Plástica logra su objetivo e incide en el aspecto psicológico, ya que muchas veces la pérdida de la mama además de afectar a la paciente por padecer un cáncer, le deteriora en distinta medida la imagen corporal, la femineidad, la sexualidad, las relaciones de pareja y la autoestima hasta llegar a influir en la identidad personal y social.

En muchas pacientes que no aceptan ser sometidas a una mastectomía, la reconstrucción ayuda a aceptar y enfrentar dicho tratamiento.. El 90 % de las pacientes que requieren una mastectomía, están en condiciones de realizarse una Reconstrucción Mamaria en forma inmediata y muchas pacientes operadas hace años o décadas, también pueden acceder en forma diferida a la misma.

Es importante que en todo momento tenga conciencia que el objetivo del tratamiento es lograr curar la enfermedad o tener la mejor sobrevida posible sin que el procedimiento estético o reparador la aleje de este fin. Si para privilegiar la salud a veces es necesario diferir la reconstrucción.

Una vez decidida la extirpación de la mama, el mastólogo y el cirujano plástico trabajarán en forma conjunta para desarrollar una estrategia en pos de ofrecer la mejor solución oncoplástica adaptada a cada paciente teniendo ella un rol protagónico en las decisiones y estrategias quirúrgicas. Es importante que el cirujano plástico brinde toda la información sobre los procedimientos cumpliendo además un rol de psicólogo convirtiéndose en pilar del tratamiento y seguimiento de la paciente que, gracias a esta contención, recobra fuerzas para luchar y vencer al cáncer de mamm.

Los procedimientos diferentes van desde el uso de prótesis mamarias de siliconas previa su expansión tisular o la utilización de tejidos propios con diferentes técnicas de alta complejidad pudiendo tomar tejidos del dorso, el abdomen, con técnica convencional o el uso de microcirugías.

En esta enfermedad es fundamental la relación médico-paciente, la empatía con la paciente, el tiempo que dedicamos a la consulta, la contención emocional y el trato afectivo y humano, características a veces no muy tenidas en cuenta por los distintos sistemas de salud de nuestro país. 

En la actualidad la consulta con el cirujano plástico antes de cualquier cirugía mamaria por cáncer para evaluar una reconstrucción es un derecho de todo paciente plasmado en la Ley Nacional 26.872 que obliga al Estado, a la Seguridad Social y a las Empresas de Medicina Privada a cubrir integralmente los costos, honorarios profesionales y gastos de insumos protésico a través del PMO o Programa Mínimo Obligatorio.

En realidad es el mismo Estado a través de sus Ministerios u organismos de ayuda social, los que no cumplen hoy con el PMO ya que en muchos casos no provee la tecnología o los insumos básicos como expansores de tejidos y prótesis mamarias y la Cirugía es postergada en el tiempo o directamente no se realiza o se deben elegir técnicas más complejas que no requieran de estos elementos protésico, transformándose el tipo de cobertura social en una limitante discriminatoria en cuanto a la accesibilidad Universal al tratamiento.

En muchos Centros Hospitalarios no tan alejados de las grandes ciudades, no existen cirujanos plásticos que realicen la cirugía o técnicas más complejas aún estando bajo la cobertura del PAMI o del IOMA en Buenos Aires, debiendo derivar o trasladar a la paciente a centros más complejos. Esto ocurre por la falta de jerarquización de la especialidad y de una política de estímulo a la inversión en profesionales especializados alejados de grandes Centros urbanos. 

En cuanto a la Cirugía reconstructiva que demanda técnicas complejas con una alta especialización, sería positivo más allá de la obligatoriedad de la cobertura, la jerarquización de estas técnicas  para el equipo profesional a través de honorarios justos y dignos por parte de la Seguridad Social y de las Empresas Privadas que permitan ofrecer una excelente calidad del recurso médico y la conformación de un equipo con los mejores especialistas sin discriminar la condición social de las pacientes.

Como contradicción y sin discriminar, pero marcando hechos objetivos relacionados con la cobertura de tratamientos, el Estado a través de la Ley de Identidad de Género de Argentina  26.743 y que permite que las personas trans sean tratadas de acuerdo a su identidad autopercibida e inscritas en sus documentos personales con el nombre y el género vivenciado, ordena  que todos los tratamientos médicos de adecuación a la expresión de género sean incluidos en el Programa Médico Obligatorio, lo que garantiza una cobertura de las prácticas en todo el sistema de salud, tanto público como privado permitiendo acceder a las personas trans a la Cirugía de feminización e inclusión de prótesis manarías en forma gratuita a nivel público, privado y de la Seguridad Social.

No se cubre la Reconstrucción Mamaria en pacientes con cáncer de mama ni aún con amparos legales pero si se obliga a la cobertura social integral del cambio de género con organismos que están muy pendientes del cumplimiento de esta última cobertura. Por el contrario, si la paciente no tiene cobertura, medios propios o el Estado no cubre los insumos para una reconstrucción Mamaria, se le realiza solo la mastectomía para tratar el cáncer.

En todo servicio de patología mamaria debe formar parte activa un equipo de cirugía plástica. El trabajo multidisciplinario es importante para tratar cualquier enfermedad, pero se convierte en prioritario al tratar el cáncer. 

Durante mi fellow en Cirugía Oncoplástica Mamaria en el reconocido Instituto dei Tumori de Milán en 1990, hace 30 años, toda paciente que iba a ser sometida a una resección parcial o total de la mama por cáncer, tenía la posibilidad de consultar en forma inmediata con el Cirujano Plástico y programar una Reconstrucción.

Es el día de hoy que ese avance aún no se logró en muchas zonas de nuestro país donde no se tiene acceso a un cirujano plástico o a la realización de estas técnicas o a la provisión de los insumos o prótesis a pesar de estar la Argentina a la vanguardia en la técnicas de esta cirugía reconstructiva y tener los mejores profesionales con prestigio internacional. Es una asignatura pendiente en el sistema público y de la seguridad social que se debe modificar en lo inmediato pese a la alta formación y especialización de nuestros cirujanos plástico.

  * Dr Jorge R. Pedro – MN 69.163. Especialista Universitario En Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva UBA. Miembro Titular de la Sociedad Argentina De Cirugía Plástica Estética Y Reconstructiva  Sacper. Médico de Planta de la División Cirugía Plástica del Hospital de Clínicas José De San Martín, UBA .  

Fuente: https://www.perfil.com/noticias/opinion/jorge-pedro-cancer-de-mama-toda-paciente-tiene-derecho-a-una-reconstruccion-mamaria.phtml